En la quietud de una mañana del 6 de enero, sueños y voces de antaño, llenos de bonitos recuerdos, el corazón acaricia la memoria de años llenos de historias .
El día de Reyes trae consigo alegría de días de mi infancia, de la de mis niños, y ahora como abuela, la magia de ese día vuelve a brotar de alguna manera. Siempre lo siento así y el momento está lleno de regalos, materiales y inmateriales como la paz y el amor.
La ilusión de este día nunca envejece, es eterna y sincera, vive en cada corazón sin importar la edad.
Hoy el día de Reyes el alma rejuvenece a pesar de los años es como si el tiempo lo enriqueciera.